La tecnología es tan impredecible que en 2020 se dijo que aun faltaban mas de 20 años para construcción la primera planta de fusión nuclear, pues ese mismo año varios países entre los cuales se encuentra China ya estaban en fases avanzadas de pruebas y experimentación de la fusion nuclear. La panacea de la energía : Generacion Limpia (verde) e ilimitada. El sueño de los humanos.

Lo cierto es que la tecnología avanza a pasos agigantados que en unos cuantos años mas (no mas de 5-6) ya se tendrán plantas de fusion nuclear en varios paises.
A continuation te explicare mas sobre el tema y esperemos que en nuestra vida podamos ver realizado el proyecto que no solo implicaría hacer realidad el sueño de la energía limpia e ilimitada, sino ampliara de manera rotunda y contundente las mentes y la ciencia de la humanidad.
La fusión nuclear se produce al romper dos átomos simultáneamente y no genera residuos radiactivos de larga duración, y se considera una energía verde ilimitada que consume combustible barato y abundante, son isótopos de hidrógeno llamados deuterio y tritio.
La tarea para lograr este proyecto es titánica, controlar una fusión nuclear se asemeja a querer mantener el sol en una caja; este desafío ha mantenido muy ocupados a los científicos por décadas. Para que los isótopos de hidrógeno se calienten, hay que alcanzar 10 veces la temperatura del núcleo del sol, esto produce un plasma hipercaliente. Este plasma debe mantenerse estable, por lo cual hay que confinarlo y mantenerlo aislado de otros elementos; esto se logra utilizando electroimanes gigantescos que mantienen girando el plasma, en un reactor circular llamado Tokamak.
El Reactor Termonuclear Experimental Internacional (ITER) en Francia está diseñado para lograr estas condiciones y además hacerlo, utilizando muchísimo menos energía que los prototipos previos, que inexorablemente consumían más energía que la que podían producir. Este proyecto existe desde el final de la guerra fría e incluye la colaboración de universidades, laboratorios, y empresas de todo el mundo, se estima que se llevará cinco años únicamente el reunir todos los componentes de esta planta. El presidente de Francia, Emmanuel Macron, presidió la ceremonia de arranque del montaje del reactor el pasado 28 de julio de 2020 e indicó que, a finales de 2025, se espera llevar a cabo el ensayo de la primera producción de plasma. Una vez superada la prueba y asegurándose que el reactor funcione, se requerirán 10 años más para que la planta comience a producir energía. Si bien se antoja lejano un proyecto de estas dimensiones que ofrece revolucionar para siempre la forma en que se produce la energía, y esta será de manera renovable e ilimitada, vale muy bien la espera. Estamos en el umbral de materializar un proyecto que en sus inicios parecía solo algo posible en una película de ciencia ficción.
Y en China…:
El famoso reactor nuclear de China, mejor conocido como el sol de China, acaba de romper un récord mundial después de haber logrado calentar un bucle de plasma a una temperatura cinco veces más alta a la del Sol real por poco más de 17 minutos.
El reactor nuclear EAST (Experimental Advanced Superconducting Tokamak) logró mantener una temperatura de 70 millones grados Celsius por al menos mil 056 segundos, lo que acerca poco a poco a los científicos hacia la creación de una energía limpia ilimitada.
El récord anterior lo mantenía el reactor de fusión nuclear francés, Tore Supra Tokamak. Este reactor logró, en el 2003, alcanzar temperaturas similares por al menos 390 segundos.
Mientras que por otro lado es importante mencionar que el núcleo del Sol real logra alcanzar temperaturas de alrededor de 15 millones grados Celsius.
“La operación reciente sienta una base científica y experimental sólida para el funcionamiento de un reactor de fusión”, dijo en un comunicado el líder del experimento Gong Xianzu, investigador del Instituto de Física del Plasma de la Academia de Ciencias de China.
Se espera que EAST le cueste a China más de un billón de dólares para cuando el experimento finalice en junio, y se está utilizando para probar tecnologías para un proyecto de fusión aún mayor, el Reactor Termonuclear Experimental Internacional (ITER), que actualmente se está construyendo. Marsella, Francia.
Los datos parten de una de las voces más autorizadas en la materia en su país. Al margen de su carrera académica, Peng, de 81 años, es padre de alguna de las ojivas nucleares pequeñas más avanzadas de China y ha ejercido como asesor del programa de armas nucleares del país.
Las reacciones de fusión las reproduce una máquina Z-pinch a través de la presión magnética creada por un potente pulso eléctrico. El objetivo —detalla el TSCMP— es que esté completada hacia 2025 en Chengdu, provincia de Sichuan. Una vez listo, el dispositivo generará alrededor de 50 millones de amperios en electricidad, lo que superaría con creces la capacidad de la instalación de energía pulsada Z situada en el Laboratorio Nacional de Sandia de los Estados Unidos.
La tarea no resultará sencilla. Hasta ahora no se ha logrado construir una instalación capaz de generar más energía de la que emplea en el proceso de fisión. En China, precisó Peng, quieren conseguirlo creando una reacción de fusión nuclear echando mano de fuertes pulsos eléctricos que provocarán la ignición de una pequeña cantidad de deuterio y tritio, isótopos de hidrógeno.
El experto chino calcula que al controlar el proceso podrá limitarse la energía del pulso liberada a unos cientos de millones de julios, equivalente, más o menos, a 20 kilogramos de explosivo TNT. Las partículas despedidas con la detonación las absorbe a su vez el uranio que cubre las paredes de la cámara, lo que deriva en su división en elementos más livianos. El fenómeno, señalan desde el rotativo de Hong-Kong, es similar al que se da en las centrales nucleares actuales.
Según los cálculos de Peng se logrará aumentar entre unas 10 y 20 veces la producción de calor, acelerando la aplicación de energía de fusión. Si el equipo chino sigue el cronograma que se ha marcado, estará listo para la producción de energía a nivel comercial hacia 2035.
Alcanzar su objetivo, claro está, supondrá hacer frente a importantes desafíos, como disponer de instalaciones capaces de transmitir y almacenar la energía eléctrica que se genere. El propio TSCMP cita a un físico que advierte de que el sistema presenta problemas que complican su uso comercial.
La futura planta china podría utilizar además tanto mineral de uranio natural como desechos nucleares generados por los reactores o torio. La idea, incidió Peng durante su presentación, es cubrir la demanda de energía durante miles de años sin apenas residuos radiactivos.