¿Te acuerdas del cuento del emperador que desfilaba desnudo y todos a su alrededor fingían admirar su “traje nuevo”? Pues eso pasa más seguido de lo que crees, ¡y a ti también te puede pasar! A veces, aunque sepamos que algo está mal o no tiene sentido, nos quedamos callados y seguimos la corriente como borregos. ¿Por qué? Pues porque …
Leer Mas...