¿Qué es exactamente la creatividad? Muchos de nosotros asumimos que la creatividad es algo que tuvimos cuando éramos niños pero que perdimos, o algo asignado a individuos enrarecidos que sólo podemos admirar desde lejos.
Pero la ciencia ha demostrado que, en muchos sentidos, todos estamos programados para crear.
Creatividad ¿Solo del Lado Derecho Del Cerebro?
Los neurocientíficos que estudian la creatividad han descubierto que la creatividad no implica una sola región del cerebro ni siquiera un solo lado del cerebro, como sugiere el mito de la creatividad del “cerebro derecho”; en cambio, recurre a todo el cerebro. Este complejo proceso consta de muchos sistemas cognitivos y emociones que interactúan, con diferentes regiones cerebrales para realizar en conjunto un trabajo.
¿Que es la “RED PREDETERMINADA”?
La “red predeterminada” del cerebro es la parte del cerebro que funciona cuando no realizamos otras tareas intencionalmente y nos permite construir significado personal a partir de nuestras experiencias, imaginar otras perspectivas y escenarios, comprender historias y reflexionar sobre estados mentales y emocionales, tanto los nuestros como los de los demás.
¿Que es la “RED DE ATENCION EJECUTIVA”?
La “red de atención ejecutiva” del cerebro también es crucial para la creatividad. Los procesos de control ejecutivo apoyan el pensamiento creativo al ayudarnos a planificar deliberadamente acciones futuras, recordar usar varias tácticas creativas, realizar un seguimiento de las estrategias que ya hemos probado y rechazar las ideas más obvias. También nos ayudan a enfocar nuestra imaginación, bloqueando las distracciones externas y permitiéndonos sintonizarnos con nuestras experiencias internas.
Malabarismo entre REDES CEREBRALES
Las personas creativas son particularmente buenas ejerciendo flexibilidad para activar y desactivar estas redes cerebrales que en la mayoría de las personas tienden a estar en desacuerdo entre sí. Al hacerlo, son capaces de hacer malabarismos con modos de pensamiento aparentemente contradictorios: cognitivo y emocional, deliberado y espontáneo. Incluso a nivel neurológico, la creatividad es confusa.
Desarrollar la creatividad como un HABITO
Desarrollar la creatividad como un hábito, una forma de vida y un estilo de relacionarse con el mundo.
Estos son algunos de los hábitos mentales que se recomiendan para fomentar una mayor creatividad en su vida.
1. Juego imaginativo
Observar a los niños en sus juegos imaginativos revela una fuente de creatividad innata. Cuando participan en juegos de simulación, los niños adoptan múltiples perspectivas y manipulan de manera lúdica emociones e ideas.
Como adultos, cultivar un sentido del juego infantil puede revolucionar la forma en que trabajamos.
Las investigaciones muestran que las formas híbridas de trabajo y juego pueden en realidad proporcionar el contexto más óptimo para el aprendizaje y la creatividad, tanto para niños como para adultos, y que el juego y la alegría intrínseca están íntimamente conectados, creando una sinergia que naturalmente conduce a una mayor inspiración, esfuerzo y crecimiento creativo.
2. Pasión
La pasión a menudo surge de una experiencia o una relación que nos conmovió de alguna manera y puede llevarnos a la inspiración. A menudo es el combustible emocional que impulsa a uno a recorrer un camino creativo, pero es sólo el comienzo. Las personas que cumplen sus sueños creativos a largo plazo equilibran el entusiasmo por el futuro con estrategias realistas para acercarse a sus objetivos; inspiración con trabajo duro; y soñar con el hacer.
Cuando alguien te aconseje “sigue tu pasión”, ten cuidado: además de ser uno de los clichés más comunes, no es un consejo muy útil. Debes buscar una pasión que esté en armonía con tu yo auténtico y que sea compatible con tus otras actividades. La pasión por demostrar tu valía ante los demás probablemente no resulte en creatividad, ya que depende de que evites desafíos que de otro modo te conducirían al crecimiento. Entonces, si bien debes estar abierto a lo que te inspira, no sigas ciegamente la pasión. Asegúrese de que realmente resuene con usted y sus habilidades.
3. Soñar despierto
Las personas creativas saben, a pesar de lo que sus padres y profesores les hayan dicho, que soñar despiertos es cualquier cosa menos una pérdida de tiempo. Una revisión de la ciencia más reciente sobre la ensoñación ha demostrado que distraerse ofrece recompensas muy personales, incluyendo la incubación creativa, la autoconciencia, la planificación futura, la reflexión sobre el significado de las propias experiencias e incluso la compasión.
Por muy vano que parezca, el acto de divagar la mente es a menudo cualquier cosa menos absurdo; puede conducir a mejoras en el pensamiento creativo. Por lo tanto, la próxima vez que trabaje duro en un proyecto creativo o en una tarea que requiera una concentración intensa y habilidades creativas, intente tomar un descanso de cinco minutos para soñar despierto cada hora. Intente realizar una actividad sencilla que le permita a su mente divagar, como caminar, hacer garabatos o limpiar, y observe cómo afecta sus ideas y su pensamiento.
4. Soledad
La metafórica “habitación propia” es una necesidad básica para muchas personas creativas. Ahora, la ciencia ha reforzado lo que han demostrado los hábitos de trabajo de innumerables artistas: el tiempo para la reflexión en solitario realmente alimenta la mente creativa.
Los neurocientíficos han descubierto que la reflexión solitaria y centrada en el interior emplea una red cerebral diferente a la de la atención centrada en el exterior. Cuando nuestro enfoque mental se dirige hacia el mundo exterior, la red de atención ejecutiva se activa, mientras que la red de imaginación normalmente se suprime. Por eso nuestras mejores ideas no suelen surgir cuando nuestra atención está plenamente centrada en el mundo exterior.
Es importante hacer tiempo para la soledad, darse espacio para reflexionar, hacer nuevas conexiones y encontrar significado. Desafortunadamente, la soledad está ampliamente infravalorada en la sociedad, lo que lleva a muchas personas a evitar el tiempo a solas. Tendemos a ver el tiempo que pasamos solos como una pérdida de tiempo o como un indicio de una personalidad antisocial o melancólica. Pero la capacidad de disfrutar y hacer un uso productivo de nuestra propia empresa puede desencadenar la creatividad al ayudarnos a acceder a nuestros pensamientos y a nuestro propio mundo interior. Así que no lo evites… ¡abrázalo!
5. Intuición
La intuición surge de sistemas de procesamiento de información inconscientes o espontáneos y juega un papel importante en cómo pensamos, razonamos, creamos y nos comportamos socialmente. En los últimos treinta años, los científicos cognitivos han logrado grandes avances en la desmitificación del poder de la mente inconsciente, lo que ha llevado al reconocimiento de una teoría de proceso dual de la cognición humana, o la teoría del “cerebro rápido y lento”. La intuición es parte del sistema cerebral rápido.
El cerebro rápido es estructuralmente más sofisticado que el cerebro lento. Nos ayuda a asimilar nueva información en nuestras estructuras de conocimiento existentes y nos ayuda a reconocer patrones complejos y a establecer conexiones no convencionales que conducen a ideas y soluciones más originales. El cerebro rápido desempeña el papel más importante a la hora de generar ideas creativas, mientras que el cerebro lento, más deliberado, desempeña un papel más importante a la hora de explorar esas ideas y jugar con ellas para determinar sus usos y aplicaciones. Tanto el cerebro rápido como el cerebro lento tienen un papel que desempeñar.
6. Apertura a la experiencia
La apertura a la experiencia (el impulso hacia la exploración cognitiva de los mundos interior y exterior de uno) es el rasgo de personalidad más fuerte y consistente que predice el logro creativo. La apertura puede ser intelectual, caracterizada por la búsqueda de la verdad y el impulso de involucrarse con las ideas; estético, caracterizado por el impulso de explorar la fantasía y el arte y experimentar la absorción emocional en la belleza; o afectivo, caracterizado por explorar las profundidades de la emoción humana.
Las investigaciones han descubierto que el deseo de aprender y descubrir parece tener una influencia significativamente mayor en la calidad del trabajo creativo que el intelecto por sí solo. Entonces, si deseas impulsar tu creatividad, prueba una nueva salida creativa o un medio de expresión totalmente diferente, o toma una nueva ruta a casa desde el trabajo, o busca un nuevo grupo de personas con diferentes intereses o valores que puedas aprender. de. La apertura a nuevas experiencias puede ayudar a aumentar su complejidad integradora: la capacidad de reconocer nuevos patrones y encontrar vínculos entre piezas de información aparentemente no relacionadas.
7. Atención plena
Si bien la capacidad de observar el momento presente sin distracciones ni juicios es una habilidad vital para cualquiera que busque alegría y satisfacción en la vida, es particularmente importante para los pensadores creativos.
Un gran conjunto de investigaciones ha asociado la atención plena (tanto como práctica como como rasgo de personalidad) con muchos beneficios cognitivos y psicológicos, como una mejor concentración en las tareas y una atención sostenida, empatía y compasión, introspección, autorregulación, mejor memoria y mejor aprendizaje, y afecto positivo y bienestar emocional. Muchos de ellos son fundamentales para la creatividad.
Sin embargo, para lograr una flexibilidad cognitiva y una creatividad óptimas, es mejor lograr un equilibrio entre la atención plena y la distracción mental. Algunas formas de atención plena pueden en realidad ir en contra de la creatividad, específicamente aquellas que alientan a uno a dejar de pensar en lugar de aceptarlos de una manera más abierta. Curiosamente, se ha descubierto que la meditación de seguimiento abierto, que enfatiza la sintonización con la propia experiencia subjetiva, aumenta tanto la activación como la conectividad funcional de la red de imaginación. Por lo tanto, intente practicar una forma de meditación de monitoreo abierto o no directiva, y permita que la mente divague de manera constructiva y al mismo tiempo aumente la atención.
8. Sensibilidad
Si pensamos en la creatividad como “conectar los puntos” de alguna manera, entonces las personas sensibles (aquellas que tienen una mayor sensibilidad a su entorno y también una experiencia intensificada de información sensorial, como el sonido, la iluminación y el olor) experimentan un mundo en donde hay más puntos y más oportunidades de conexión.
La sensibilidad puede ser tanto una bendición como una maldición, lo que lleva a una mayor intensidad de la experiencia y a un abrumador emocional. La periodista Andrea Bartz escribió en Psychology Today que “aquellos que aprenden a controlar los implacables descensos y crestas de la emoción que acompañan casi invariablemente a la sensibilidad extrema son capaces de transformar la percepción cruda en una percepción aguda”.
Entonces, en lugar de intentar endurecerte, quizás quieras aprovechar tu sensibilidad para expresarte artísticamente.
9. Convertir la adversidad en ventaja
Las experiencias de pérdida, lucha, sufrimiento y derrota pueden ser poderosos catalizadores para el crecimiento personal, la creatividad y la transformación profunda. A menudo es a través del sufrimiento que aprendemos la compasión, de la pérdida aprendemos a comprender y de la superación de las luchas llegamos a descubrir nuestra propia fuerza y belleza.
Los acontecimientos adversos pueden obligarnos a reexaminar nuestras creencias y proyectos de vida, y ahí radica su poder y potencial creativo. Después de la experiencia de la adversidad, la mente está desmantelando activamente viejos sistemas de creencias que ya no se sostienen y creando nuevas estructuras de significado e identidad. Para encontrarle sentido a las experiencias difíciles, pruebe la escritura expresiva , que según las investigaciones puede disminuir los síntomas del estrés postraumático y la depresión, al tiempo que mejora algunas funciones cognitivas, como la memoria de trabajo.
Curiosamente, las investigaciones también han descubierto que los acontecimientos positivos extremos (en particular, aquellos que evocan sentimientos de asombro, asombro, inspiración y conexión con algo más grande que uno mismo) también pueden fomentar la creatividad. Las emociones positivas construyen los recursos psicológicos de una persona, ampliando la atención, inspirando nuevos pensamientos y comportamientos y estimulando el pensamiento creativo. Por lo tanto, si está buscando un impulso creativo, trate todos los momentos significativos de la vida (los buenos y los malos) como fuentes potenciales de inspiración y motivación.
10. Pensar diferente
Las personas creativas están unidas por su falta de voluntad para respetar las formas convencionales de pensar y hacer las cosas. Al elegir hacer las cosas de manera diferente, aceptan la posibilidad de incertidumbre y fracaso, pero es precisamente este riesgo el que abre la posibilidad de una verdadera innovación.
El secreto de la grandeza creativa parece ser hacer las cosas de manera diferente, incluso cuando eso signifique fracasar. Especialmente durante las fases de generación de ideas, el ensayo y error es esencial para la innovación. El decano Keith Simonton, que estudia la creatividad, descubrió que la calidad de las ideas creativas es una función positiva de la cantidad: cuantas más ideas generen los creadores, mayores serán las posibilidades de que produzcan una eventual obra maestra. Hacer las cosas de manera diferente significa que probablemente harás las cosas mal o mal; así que espere eso y no permita que la precaución se interponga en el camino de la creatividad.
¿Seguir todas estas rutas hacia la creatividad significará que te convertirás en un genio creativo? No necesariamente. Pero, cuando el artista está vivo en cualquier persona, cualquiera que sea su tipo de trabajo, se convierte en una criatura inventiva, investigadora, atrevida y autoexpresiva. Si aprendemos a aceptar nuestro yo desordenado y creativo, les damos permiso a los demás para que hagan lo mismo. Ayudamos a crear un mundo más acogedor para el espíritu creativo y hacemos posible encontrar una mayor conexión con los demás y con nosotros mismos en el proceso.